En su intervención en el Consejo de Seguridad, la diplomática pidió respeto para los derechos fundamentales de los palestinos, y el reconocimiento de ese territorio como un Estado soberano e independiente.

Asimismo, enfatizó en la necesidad de garantizar el retorno de los refugiados a su tierra ancestral.

No vamos a aceptar una autononomía limitada, necesitamos que se reconozca el derecho de los palestinos a la libre determinación y a controlar sus propios recursos y fronteras, recalcó.

A mi pueblo se le niega el derecho al retorno y a la libre determinación, es expulsado de sus tierras y marginado, sufren todo tipo de humillaciones y privaciones debido a la ocupación de Israel, que no conoce de fronteras, denunció la embajadora.

En la actualidad, detalló, cinco millones de palestinos están lejos de sus hogares y tierras ancestrales, mientras se mantiene una peligrosa inmunidad para Israel.

Dado lo prolongado y grave de esta injusticia, el Consejo de Seguridad debería cumplir con las obligaciones que se le otorgan según la Carta de la ONU y hacer valer las resoluciones adoptadas sobre la cuestión palestina, señaló.

La comunidad internacional sigue reafirmando la necesidad de una solución justa, basada en la creación de dos Estados, sobre la base de las fronteras previas a 1967 y con Jerusalén Oriental como capital compartida, indicó.

Pero las acciones de Israel contrastan con este consenso global, de hecho, lo socavan y contradicen, consideró la embajadora palestina.

Tel Aviv continúa su ocupación militar beligerante y su colonización de la tierra palestina, este apetito expansionista y anexionista no ha hecho más que crecer en paralelo a su convicción de que se puede salir son la suya, alertó.

Nadie puede negar que necesitamos un esfuerzo renovado para superar el asfixiante estancamiento político que existe ahora, pero solo se puede cimentar una solución justa, genuina y duradera sobre el respeto a los derechos humanos.

Hace 30 años, el pueblo palestino y sus líderes hicieron la concesión de aceptar la solución de dos Estados, lo cual los dejaba con solo el 22 por ciento de su Patria histórica, expresó.

Ese es el ofrecimiento más generoso para la paz que hizo el pueblo palestino, pero Israel lo ha pisoteado, aseveró.

La realidad desesperante que hoy enfrentamos es obra de Israel y sus acciones colonialistas, resaltó la embajadora.

Palestina cree en el multilateralismo y el diálogo como elementos fundamentales para logar la paz: una solución justa no se puede aceptar mientras Israel siga pisoteando los derechos humanos, insistió.

Asimismo, rechazó las acusaciones de Israel y Estados Unidos que ven a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (Unrwa por sus siglas en inglés) como un organismo fallido.

En ese sentido, recordó, los programas de la Unrwa son reconocidos por la comunidad internacional como ejemplo de asistencia humanitaria y soporte al desarrollo.